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En su primera participación en el Rallye Tías – Yaiza la pareja Oliver Rodríguez-Iván Rodríguez no desentonó. No lo hizo mientras estuvo en carrera, ya que lideraron la primera de las dos jornadas programadas.
Pero en esta ocasión la suerte no estuvo de cara para el equipo apoyado por Lanzagrava y Alquifer. En la primera especial del sábado, ‘Tabayesco-Las Nieves’ con sus cerca de 12 kilómetros de recorrido y a raíz de un pinchazo, sus aspiraciones se fueron al traste.
“Había dos piedras justo sobre la línea blanca de la carretera y pinchamos la rueda delantera derecha”, recuerda el piloto del SEAT Córdoba WRC. “Fuimos avanzando y se destalonó el neumático”, así que la banda de rodadura rompió un elemento eléctrico que dejó el coche sin energía. En esa espera, el neumático trasero derecho también perdió todo su aire, por lo que el pinchazo se podría considerar doble. Un mal que también sufrieron otros participantes y que, para Rodríguez-Rodríguez, significó su primer abandono de la temporada.
“Nos quedamos con las ganas de seguir porque nos estábamos encontrando muy bien”, dijo el líder del campeonato insular después de evaluar su participación en el ‘Tías-Yaiza’. “Está claro que un abandono nunca es positivo, pero nos quedamos con las buenas sensaciones y con que el título sigue dependiendo de nosotros”, subrayó el piloto apoyado por Lanzagrava y Alquifer.
El desenlace del campeonato tendrá lugar el primer fin de semana del mes de diciembre con el Rallye Isla de Lanzarote. Una prueba que Oliver Rodríguez ya ha conquistado en términos absolutos; en esta ocasión, el del SEAT Córdoba WRC saldrá con la mente en el campeonato.
