jueves, 28 de marzo de 2024

Los R5 quieren tumbar la puerta

Opinión  |  18 julio 2018 17:53

Aunque con cierta timidez, la categoría R5 va camino de asentarse en Canarias. Ya son varias las unidades que han establecido ‘su residencia’ en el archipiélago y se habla de otras que podrían llegar en un futuro no muy lejano. Si la normativa no les dejase en inferioridad de prestaciones, el desembarco de más R5 sería viable.

En más de una ocasión he dicho que nuestro pequeño rinconcito del Atlántico fue siempre un paraíso en lo que a los rallyes se refiere. Cuando las firmas apostaban por este deporte, y después con los grandes empresarios que dieron rienda suelta a su hobby, las más codiciadas máquinas desfilaron por nuestros tramos.

Por la razón que fuese, los R5 han encabezado la primera mitad del regional de rallyes sobre asfalto. Pero es obvio que el claro dominador ha sido un Porsche 997 GT3 2010, con él en los tramos poco han podido hacer las máquinas más actuales, incluso con la brida –obligatoria en las pruebas del CERA- seguía siendo un caballo ganador.

Hyundai Canarias, con más de una unidad, baraja la posibilidad de aprovechar su carta en el regional de asfalto. Surhayén Pernía lo llegó a encabezar después de la segunda cita, recogiendo el testigo el Peugeot 208 T16 R5 de Adrián García. El tinerfeño convenció a Automotor Canarias para enrolarse de nuevo en este apasionante mundo, devolviendo así a la marca a la que siempre fue su casa: el mundo de los rallyes.

El vigente campeón canario, Enrique Cruz, ha declarado que le motiva medirse con sus rivales al volante de un R5. En La Palma, un buen amigo suyo ha barajado la posibilidad de cambiar de aires en 2019 y tomar los mandos de un tracción total con mecánica turboalimentada de los que hoy hablamos. A estas unidades hay que unir las que ya están por Tenerife, una isla en la que algún que otro piloto se encuentra en estos instantes haciendo números para dar viabilidad a la adquisición de una máquina de éstas.

No hay duda. Ellos son pilotos de rallyes y lo que quieren es competir con un vehículo diseñado y pensado para los tramos cronometrados. Hacerlo en igualdad de condiciones y con varias marcas representadas ayudaría a que el certamen regional adquiriese una dimensión no tan lejana.

Para ello, y en año de elecciones, conviene que los máximos dirigentes del automovilismo canario actualicen su visión de esta modalidad deportiva, es prioritario que adquieran conocimientos más actuales en cuanto a promoción y divulgación del deporte que dirigen. La historia de nuestro deporte, de manera concreta en nuestra tierra, merece en estos momentos todo tipo de mimos ante la nueva etapa que se avecina.