Recientemente Hyundai Canarias presentó el nuevo Ioniq, un nuevo concepto de automóvil que, sobre una misma plataforma, ofrece tres variables de movilidad: híbrido, eléctrico y por último un híbrido enchufable que comenzará su producción en abril del próximo año.
Para Hyundai Canarias la llegada de este modelo “es de una importancia relevante de cara a la movilidad sostenible” en las islas, “un cambio trascendente”, aseguran desde Corauto Canarias. Además de ser un producto disponible ya para el público –se estudia la posibilidad de incluirlo para el Rent a Car-, la firma en Canarias quiere salir de su zona de confort y rutina diaria, apostando por un mercado aún inmaduro que no llega al dos por ciento de cuota
Aerodinámica y diseño
Galardonado con el ‘Red Dot Design Award 2016’, la figura del Ioniq responde a un ejercicio de diseño y, al mismo tiempo, a una estudiada aerodinámica. Los paragolpes ayudan a disipar aire, ofreciendo con ello una mejor penetración en el mismo, un ejercicio similar 
al que realiza el ala posterior. El fondo plano, que concluye en un difusor, persigue los mismos objetivos, así como la parrilla activa de los modelos híbrido y enchufable. En la versión eléctrica, ya que no hay propulsor que requiera refrigeración, es cerrada.
La tecnología de vanguardia se ve reflejada en sus faros bi-xenón, que se hacen acompañar de unas luces diurnas LED en forma de ‘C’. La variante eléctrica opta por el LED en todos los puntos lumínicos, incluidas las ópticas traseras.
En materia de diseño, Hyundai ha previsto una serie de detalles diferenciadores para las tres versiones del Ioniq. Obviamente la que más sobresale es la parrilla del modelo eléctrico, pero además hay otro detalle. En el ‘bigote’ inferior del paragolpes anterior se encuentra una línea de color que puede ser azul o plata, en los modelos híbridos o híbridos enchufables, y cobre en el 100 por 100 eléctrico.
Interior
Este espacio del Hyundai Ioniq refleja su esmerado proceso de diseño. La ubicación de las baterías, que lógicamente difieren por el tamaño de las mismas en función del modelo, no afecta en demasía al espacio de los cinco pasajeros, incluso al de un maletero que supera los 440 litros de capacidad. De polímero de iones de litio en lugar de níquel-hidruro, las baterías están dispuestas bajo los asientos traseros. Con todo, el centro de gravedad del Ioniq es incluso más bajo que el de un Volkswagen Golf GTI de última generación.
Uno de los detalles más sorprendentes es el empleo de materiales ecológicos. Elementos reciclados o ecológicamente sensibles han sido utilizados en diferentes puntos del habitáculo, así como en los panales interiores de las puertas, constituidos por plástico natural, polvo de madera y piedra volcánica. Por otro lado, el panel del techo y la moqueta cuentan con materia prima extraída de la caña de azúcar. Haciendo un guiño al exterior, el aceite de soja se utiliza en los colores metálicos.
El conductor encontrará un panel que aloja una pantalla de siete pulgadas, que varía su aspecto en función de los modos de conducción. El resto de pasajeros podrá echar un vistazo a las pantallas de cinco u ocho pulgadas, en función del modelo, además de poder hacer uso de un cargador inductivo inalámbrico para recargar los smartphones.
Las variantes
La versión híbrida acoge el nuevo motor Kappa de 1.6 litros, después de haber sido acondicionado específicamente para este modelo. Desarrolla 105 CV y un par de 147 Nm. En conjunto con el motor eléctrico síncrono de imán permanente, terminar por ofrecer 
141 CV y 265 Nm de par. Su velocidad máxima es de 185 km/h con unas emisiones de 79 g/km de CO2. En modo 100 por 100 eléctrico, con una autonomía que ronda los 50 kilómetros, es capaz de alcanzar los 120 km/h. Sus llantas pueden ser de 15 o 17 pulgadas y se montan sobre unos neumáticos de baja resistencia.
Este modelo híbrido cuenta con la ventaja de montar un cambio de doble embrague y seis velocidades. Este detalle le ayuda a desmarcarse de otros modelos similares, olvidando así ese sonido de motor que, en ningún caso, iba aparejado a la velocidad del vehículo, ganando así un mayor grado de confort.
En cuanto a la versión eléctrica, su autonomía está próxima a los 300 kilómetros, valores que siempre pueden variar en función del estilo de conducción del conductor. Obviamente no hay caja de velocidades, por lo que monta un cambio reductor que le permite alcanzar los 165 km/h. Uno de los detalles a destacar son las levas situadas en el volante. Hacen de freno regenerativo en cuatro etapas, en función de la desaceleración o el frenado. Si bien su hermano híbrido cuenta con los modos de conducción Sport y Eco, éste suma la opción Normal. La batería se puede cargar en casa, sin instalación previa.
El precio de la opción híbrida es de 18.600 €, mientras que la opción eléctrica es de 25.000 €, en ambos casos sin ningún tipo de ayuda estatal en el momento de redactar este artículo. El Hyundai Ioniq cuenta con cinco años de garantía sin límite de kilometraje, mientras que la batería tiene una garantía de ocho años o 200.000 kilómetros.