Salón de Ginebra
Con el F8 Tributo que la firma de Maranello lucirá en el inminente Salón del Automóvil de Ginebra, Ferrari quiere rendir homenaje a un motor V8 que ha sido galardonado con el ‘Best Engine of the Year’ desde 2016 a 2018. Esta última creación estará lista en la muestra internacional de este mes de marzo.
El Ferrari F8 Tributo rinde 720 CV de potencia, la friolera de 185 por litro, lo que le coloca como el de mayores prestaciones en la historia de la marca. Cuenta con 50 CV más que la versión a la que sustituye, además de incrementar su eficiencia aerodinámica y de portar una evolución del sistema Side Slip Angle Control.
El motor ubicado en posición central-trasero garantiza un óptimo reparto de pesos. Desde Ferrari aseguran que su sonido es único y cautivador, mientras que a nivel de sensaciones apuntan que la sensación de turbo lag es mínima.
La implementación de soluciones dinámicas permite a los conductores menos expertos ir ganando confianza al volante de vehículos como el F8 Tributo. Así, la posición RACE del manettino del ‘Ferrari Dynamic Enhancer’ ofrece la posibilidad a más conductores de exprimir el límite de su conducción y superarlo con seguridad.
A nivel exterior, integra en el frontal el S-Duct para la carga aerodinámica en este espacio y que viene heredado del 488 Pista. El diseño de los faros Led ha contribuido a canalizar un nuevo flujo de aire para refrigerar los frenos que, en combinación con el parachoques, mejora la transición del aire a nivel general.
Por otro lado, el interior mantiene la inspiración clásica de un cockpit, con una actualización de estilo en los paneles de las puertas, el salpicadero y el túnel central. Incorpora una pantalla táctil de siete pulgadas para el acompañante.