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Después de una serie de temporadas en la que los equipos canarios no salían más allá de sus fronteras, la temporada 2018 ha supuesto un cambio de rumbo de tintes históricos. Este curso le ha dado continuidad a un 2017 que ya había sido también muy positivo, estableciendo un nuevo récord en lo que a participaciones internacionales se refiere.
Para establecer el récord de participaciones previo al de 2018 hay que viajar, nada más y nada menos, que a la temporada 1962. Lo más curioso es que ésta coincide con la primera expedición canaria a un rallye internacional. Una quincena de pilotos encabezados por José Luis Ponce e Hilario Gómez pusieron rumbo a Madeira sin conocer que aquella salida al extranjero se iba a convertir en una cifra récord con una vigencia que ha estado presente durante más de medio siglo.
A comienzos de la actual temporada, Raúl Hernández-Rogelio Peñate escribían las primeras páginas de este 
récord con su participación en los rallyes Aluksne y Sarma. Posteriormente, el Rallye Serras de Fafe, en Portugal, contó con la presencia de los del Peugeot 208 R2, sumándose Gustavo Sosa-Víctor Pérez y Daniel Guerra-Patricia Guillén. Sin duda, la cita del norte luso se ha convertido en un corto espacio de tiempo en una de las preferidas por los canarios.
Emma Falcón y Eduardo González, al volante de un Citroën DS3 R3T, han aportado más que un granito de arena a esta cifra récord. Han sido los primeros canarios en plasmar un programa al completo en el European Rallye Championship, disputando un total de siete rallyes sobre ocho y siendo los primeros en acudir a competir a Chipre, un país inédito en el automovilismo canario. Ese programa les llevó a otros escenarios míticos, como el del Rallye Acrópolis, culminando su 2018 con el título en el ERC Ladies Trophy.
Hernández-Peñate siguieron ampliando la cifra de participaciones en el extranjero con la presencia en pruebas como las de Talsi, Viru y Estonia, además de viajar al Azores Airlines Rallye donde coincidieron con Falcón-González. Por su parte, Daniel Guerra-Patricia Guillén ampliaron su experiencia en tierras lusas con los rallyes Vila do Bispo y Flor do Alentejo, en este último llevando a la derecha a Sergio Vera.
Gustavo Sosa, junto a Rogelio Peñate, viajó al Rallye Liepaja –donde Emma y Eduardo se coronaron campeones- para 
acabar el año con dos participaciones internacionales, mientras que Oliver Díaz-Isabel Pérez se convirtieron en los primeros canarios en competir en el RallyLegend de San Marino.
Las participaciones en el mundial llevaron a los canarios hasta Portugal y Cataluña. Iván Medina-Yeray Mujica, que también estuvieron en Castelo Branco, tomaron la salida en ambas citas, aunque en la segunda de ellas el piloto hizo equipo con Ariday Bonilla y el copiloto con Roberto Rozada. Julio Martínez y Alexis Romero-Martín Domínguez viajaron a la ronda española del WRC, aunque lo hicieron con distinta fortuna.
A nivel individual, Rogelio Peñate conquistó en Sudamérica el título de su categoría en el certamen Codasur. Más allá de ese título FIA en el que no tuvieron competencia a tiempo completo, cabe resaltar la ampliación de fronteras del automovilismo insular; el copiloto grancanario estuvo presente en países como Paraguay, Brasil y Bolivia, además de en Argentina, donde estuvo en la cita paralela a la puntuable para el WRC. Ariday Bonilla acompañó en el Rallye Eurocidade de Portugal a Francisco López, completando así el año más internacional del automovilismo canario.
Un dato que subiría enteros si contemplamos las participaciones de nuestros equipos en las citas españolas 
de carácter internacional, como el Rallye Sierra Morena o el Rallye Princesa de Asturias. Sin duda, un año de récord.
Estos datos se unen al excelente momento del Rallye Islas Canarias en el European Rallye Championship, donde es una de las citas mejor consideradas, al ingreso del Rallye Villa de Adeje en el European Rallye Trophy y a la próxima celebración del primer seminario FIA que tendrá lugar en España.
Veremos qué sucede en 2019. La tendencia de 2017 y 2018 es positiva, pero en este deporte todo siempre queda a expensas de los programas de cada equipo y, por supuesto, del presupuesto que se pueda reunir para afrontar certámenes de este calibre.
