Mclaren, que durante las últimas pretemporadas acumulaba averías y contratiempos un día sí y otro también, se ha estrenado esta mañana en los test de Barcelona sin ningún problema de rendimiento.
A manos de Carlos Sainz, el nuevo monoplaza ha podido rodar 64 vueltas, mostrando una gran cantidad de evoluciones y con claros síntomas de buena fiabilidad y ritmo de carrera, en esta primera mañana de las seis jornadas de test que se van a celebrar estas semanas.
El español pudo finalizar la primera sesión matinal en la cuarta posición con un crono de 1’18”001 con el neumático C3, a poco más de dos décimas de Verstappen, que fue tercero con el mismo neumático, solo superados por Bottas (Mercedes) y Pérez (Racing Point), que realizaron sus cronos con la goma blanda (C2).
La sorpresa en estos resultados es el buen rendimiento del monoplaza de Checo Pérez, que tiene un aire a un Mercedes antiguo, algo que es normal por el dinero que ha puesto la familia Stroll, propietarios de un Racing Point que se presenta como firme rival para McLaren para el curso 2020.
Ferrari parece haber aprendido la lección y ha empezado los test con un perfil más bajo, con Charles Leclerc guardándose muchas cartas con su nuevo Ferrari SF1000, firmando un crono muy discreto en la séptima posición (1’18”289).
FOTO: MCLAREN