La llegada del Volkswagen Tiguan va a suponer un revulsivo. El fabricante alemán ha puesto todas sus cartas boca arriba en el desembarco de este nuevo SUV. Entre otros detalles, adaptar los gustos al perfil de cada cliente ha sido tenido muy en cuenta. Así, emergen dos opciones muy particulares: R-Line y Off-road.
Empecemos por la segunda. Como su nombre indica, juega un papel 
fundamental en las opciones 4Motion de tracción total. Su frontal, en concreto su paragolpes, se transforma para ofrecer un ángulo de ataque de 25,6 grados, por los 18,3 de la opción convencional. Con un ángulo de salida de 24,7 grados, el Tiguan eleva su altura libre al suelo en 11 mm para situarse –como alguno de sus rivales directos- en los 200 mm. Este paquete Off-road está disponible por 490€.
Por otro lado, el paquete R-Line expresa toda la deportividad del Tiguan. Las llantas de aleación ‘Sebring’ de 19 pulgadas o las opcionales ‘Suzuka’ de 20 pulgadas, son toda una llamada a la exquisitez de esta opción. Salvo los pasos de rueda, el resto de espacios van acompañados del color de la carrocería.
Las estriberas ensanchadas, los paragolpes exclusivos con aditamentos aerodinámicos en color negro brillante, un spoiler bicolor y el difusor posterior en el mismo color de la carrocería, muestran los genes deportivos de este ‘todocamino’. El paquete R-Line está disponible por 2.490€.