Se esperaba una primera prueba en la isla de Tenerife complicada. La lluvia amenazaba para todo el fin de semana aunque, por suerte o por desgracia, no hizo acto de presencia.
Con ello en mente, los 62 equipos que pasaron las verificaciones tenían por delante tres mangas. La primera de ellas, la de entrenamientos, transcurrió sin la menor incidencia, aunque eso cambió.
La primera manga oficial trajo consigo infinidad de parones, accidentes y averías. Lo que afectaba a un público aquejado por el frío y que veía como la prueba se iba a alargar mucho más de lo esperado.
Aquí, los dos favoritos a la victoria sufrían una penalización de un minuto por no respetar la bandera roja. Así, la victoria momentánea era para Berti Díaz con el Porsche 997 GT3.
Sin embargo, en la segunda oficial los dos Ford no fallaron.
Pedro Javier Afonso lo intentaba, pero la superioridad mecánica del Fiesta Proto hacía que darle caza a Juan Carlos Brito fuera un fracaso.
Brito, que debutaba con el coche que fuera campeón nacional luso, demostró que lo visto con el vetusto Ford Escort WRC no era un espejismo y lograba una victoria contundente, récord incluido.
Para finalizar, no quería terminar esta crónica de la 10ª edición de la Subida de Palo Blanco sin mencionar, de nuevo, un problema más que serio de seguridad en la prueba organizada por la Escudería Daute. Esta vez el accidente de Arunzu Quintero se saldó con simples daños materiales, pero la suerte no siempre sonríe. Hay que mejorar.
Clasificación Categoría 3
Clasificación Categoría 1
Imagen: Gustavo Alonso