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FIA ERC - European Rally Championship | Azores Rallye
A estas alturas de la película, poca o muy poca presentación necesita Jon Amstrong, un piloto británico de 27 años fogueado en varias categorías de promoción a nivel mundial y europeo, al cual regresaba el pasado fin de semana, un campeonato que ya disputó en 2015 a tiempo parcial, y donde apareció el pasado año para disputar Polonia y Hungria.
El subcampeón del JWRC de 2021, acompañado del experimentado irlandés Brian Hoy, acudía el pasado fin de semana al Azores Rallyes con el objetivo de sumar kilómetros en tierra sobre un vehículo de cuatro ruedas motrices, con el objetivo con el fin de fortalecer su candidatura al título del FIA Junior WRC esta temporada, la cual se disputa a bordo de los Ford Fiesta Rally3, misma montura, cedida por M-Sport Polonia, con la que acudía a la cita azoriana, segunda para del FIA ERC 2022.
Aunque no salía buscando un resultado concreto y poseía exigencias de tal mero hecho, el alto ritmo de Armstrong fue evidente desde los primeros kilómetros y especiales de la jornada de apertura el sábado. Ya desde el shakedown, el británico fue el mejor ERC3, y se entremezcló entre los vehículos de la categoría Rally2. Acabó en la P18, por delante de Martins Sesks, piloto del Skoda Fabia Rally2-kit y una buena referencia en esta prueba medir el verdadero potencial del Rally3. Acto seguido, en la SS2, la que a la postre abriría el rallye, marcaría un espectacular noveno scracht absoluto y mejor ERC3, por delante de pilotos como Tempestini, Herczig, Araújo o Battistolli. Pero tal comienzo tuvo un pronto final, ya que en la siguiente especial, un charco de agua desencadenaría un problema técnico que le obligaba a tomar el camino del abandono.
Armstrong recurriría a la modalidad del súperrallye para reiniciar la actividad en la etapa del domingo, y reclamar así la victoria entre la categoría ERC3, toda vez que su máximo rival, el polaco Igor Widlak, tuvo que ver el camino del abandono por problemas de frenos. El rápido piloto británico llevó a cabo una actuación memorable en esta segunda jornada, colocando al Fiesta Rally3 entre los diez primeros en hasta seis tramos cronometrados. En el cómputo global de la segunda etapa, Armstrong fue el séptimo más rápido, un resultado que sin los impedimentos del sábado, habría podido ser su resultado final. En esta segunda jornada llegó a ser más rápido que Nobert Herczig, Simone Campedelli y se quedó a solo una décima de Bruno Magalhães, y todo ello con una incidencia en un disco freno delantero tras un golpe en la segunda pasada por Sete Cidades, y que le obligó a hacer la última especial con solo tres discos de freno.
Un resultado final que no recompensa los enormes destellos de velocidad y calidad que dejó Jon Armstrong el pasado fin de semana, donde resaltó el enorme potencial que tiene el Ford Fiesta Rally3 en manos de un piloto competitivo como él, sobre todo, en terrenos como el de Azores, revirados, sinuosos y angostos tramos sobre grava deslizante, donde la maquinaria de Cumbria se defiende a la perfección. Probablemente esta sea una de las actuaciones más interesantes de un Ford Fiesta Rally3 en el FIA ERC.
Tras esta estelar aparición, Armstrong ya focaliza su siguiente parada en el JWRC, el Rally de Croacia, una prueba a la que llega de líder tras su triunfo en la prueba inaugural de Suecia, y en la que ya destacó el pasado año consiguiendo una incontestable victoria.
