No muchos canarios pueden presumir de tener un buen palmarés a nivel mundialista, sin embargo, uno de ellos, es Rogelio Peñate. A pesar de no estar tras el volante, si no con la libreta en las manos, el copiloto canario es, quizás, el máximo exponente a este nivel.
Este año disputaba el Junior WRC junto al paraguayo Diego Domínguez, que debutaba en el certámen. Ambos hicieron de la regularidad su mayor baza, logrando cuatro podios de cinco posibles y logrando la victoria hoy mismo en el Acrópolis Rally. Esto le daba muchas opciones, ya que el último rally, en Gracia, puntuaba doble, lo que suponía 50 puntos más los sumados por los scratch.
Sus mayores rivales eran el galo Laurent Pellier y el irlandés William Creighton, que era quien estaba muy destacado con casi 30 puntos de ventaja. Sin embargo, ambos abandonaron la prueba de manera prematura y, aunque Creighton se reenganchaba, las opciones al título estaban en un alambre.
Llegaban al día de hoy Domínguez y Peñate líderes, con Eamonn Kelly segundo, compañero de equipo de Creighton, que era sexto. Este resultado, unido a un scratch que lograba el paraguayo en el primer tramo, le daban el título, pero la sombra de la sospecha existía.
¿Serían capaces de ceder una segunda plaza para lograr el campeonato con su compañero? Se lo preguntaba la afición y el propio Domínguez, que lo dejó muy claro en la primera meta en la que pudo hablar. Sin embargo, a veces las cosas son más sencillas de lo que pensamos.
Y es que el boliviano Nataniel Bruun, que era cuarto, sufrió un accidente y tuvo que abandonar, pasando Creighton a la quinta posición y tocando el título con sus manos. Esto, unido a que los Junior no disputaron la ‘power stage’ por varios accidentes de los participantes previos que obligaron a neutralizar el tramo, le daban el título al irlandés sin necesidad de ‘biscotto’
Con esto Domínguez y Peñate veían como se les escapaba un campeonato que tuvieron en su mano gran parte del último rally. Al menos, si es que sirve de consuelo, los apenas 23 añitos del piloto le permitirán redimirse en próximas ediciones.
Peñate, superando la cuarentena, vuelve a lograr el éxito que logró hace diez años, cuando junto a una de las esperanzas del automovilismo nacional en ese momento, Yeray Lemes, también fue segundo en el JWRC tras Pontus Tidemand.
