En buena medida, las competiciones se desarrollan a partir de los vehÃculos que las marcas ponen en el mercado, y su posible adaptación posterior para la competición. En Canarias el parque automovilÃstico-deportivo se ha estancado. Como ejemplo, sólo un 5% de los vehÃculos inscritos en el pasado 'Santa BrÃgida' se pueden considerar actuales.