La cuarta etapa entre San Rafael y Chielecito estaba marcada en rojo en los road-book de todos los equipos. Era el recorrido más largo que se habÃa hecho en el Dakar desde que se disputa en sudamerica y por tanto unos de los grandes obstáculos a superar en la edición 2014.
Albert Llovera y su copiloto Arnaud Debron, con el planteamiento habitual de ir superando jornadas de competición, consiguieron cubrir los 868 kilómetros en una meritoria posición final. Con este resultado, el equipo que luce los colores de Qatar, se sitúa en la posición número 40 de la provisional.
Llovera-Debron han tenido una jornada muy complicada desde el inicio. Llegaron tarde al control de salida debido a que su equipo estuvo trabajando en su mecánica hasta el último momento. Después se enfrentaron a un trazado muy duro siendo conocedores que existÃa la posibilidad de que los problemas de frenos se reprodujeran, como asà fue.
“FÃsicamente estoy hecho polvo“, estas fueron las primeras palabras que dijo el piloto andorrano después de cruzar la meta. “Los mecánicos han trabajado toda la noche pero no han podido encontrar el motivo por el cual los frenos del buggy no aguantan”, una cruz que Llovera-Debron llevan arrastrando muchÃsimos kilómetros. “Hemos decidido salir a ver qué pasaba y la verdad es que ha sido muy duro” pero para ellos lo más importante es que han “conseguido superar una etapa más”.
Los mecánicos tendrán, una noche más, trabajo extra en el coche de Albert. “Hemos hecho todo el segundo sector sin frenos, ahora creo que la bomba incorporada en mis mandos también está tocada”, por lo que valorarán “qué se puede hacer”, sabiendo que en breve “tenemos la jornada de descanso y haremos lo imposible para llegar y poder reparar con tranquilidad”, puntualizó el andorrano.
Texto: Javier Viera | Foto: MotoraDiario.com