Con el mes de junio llamando a la puerta, es momento de echar un vistazo a cómo se cuece el automovilismo insular. Una comparativa entre ambas provincias no viene mal para evaluar el resultado de una primera parte de 2018 que fue convulso por aquello de las nuevas normativas y, de manera especial, por los neumáticos asimétricos que ya se habían confirmado en noviembre de 2016.
En ese sentido, la provincia tinerfeña parece llevarle claramente la delantera a la de Las Palmas. Los inscritos en la isla de Tenerife son muchísimos más que los que está presentando la isla de Gran Canaria. ¿Afecta de manera desigual la normativa 2018? ¿Es pura gestión? Sólo se me ocurre decir que responda la parte que se sienta aludida...
Dejando a un lado la Regularidad Sport, el Rallye Norte que se celebra este fin de semana en Tenerife cuenta con nada menos que 77 inscritos en Velocidad. Es el primer rallye ‘convencional’ del año en la isla, mientras que los tres que se han celebrado en Gran Canaria –sacando de ahí al ‘Islas Canarias’ igual que en Tenerife no cuento el ‘Villa de Adeje’- presentan una media de 41 inscritos: el ‘Villa de Santa Brígida’ tuvo 34, el ‘Ciudad de Telde’ 42 y el ‘Isla de Gran Canaria’ del próximo fin de semana 47. ¡El promedio en Las Palmas refleja la mitad de participantes!
Esa tónica se repite en otras modalidades. Gran Canaria ha acogido tres pruebas de montaña que reflejan una participación media en Velocidad de 27,6 participantes (‘Juncalillo’ tuvo 22, ‘Tejeda’ 25 y ‘La Pasadilla’ 36), mientras que Tenerife con dos pruebas de montaña ya disputadas (‘El Tanque’ con 22 y ‘Los Loros’ con 46) ofrece un registro medio de 34. Incluso, la Subida Las Caletas celebrada en La Palma sumó 35 inscritos. En este apartado, la normativa 2018 no ha tenido tanta incidencia como tampoco lo ha hecho en los rallysprint. Aquí, el de ‘Artenara’ en Gran Canaria contó con 31 inscritos, por los 38 del ‘Cielo de La Palma’ y los 59 de ‘Atogo’ en Tenerife. Por último, el I Slalom CDIC (Gran Canaria) reflejó 30 inscritos, por los 42 del Slalom Antigua – FuerteMotor (Fuerteventura). En definitiva, la 'isla redonda' marcha a la cola en cuanto a participación y es así en todas y cada una de las modalidades. Ello sin hablar del karting, la cuna. El Cabildo de Tenerife se ha volcado y ya llevan dos pruebas del insular; la segunda coincidió con la primera del regional y fueron más de 40 los inscritos.
De toda esta lectura se extrae un denominador común: las pruebas que se vienen desarrollando en la provincia de Las Palmas están más lejos que nunca de las tinerfeñas. Ello, sin hablar de la calidad en la parte alta en materia de rallyes sobre asfalto. Sin ir más lejos, el Rallye Norte del próximo 2 de junio cuenta con dos unidades World Rallye Car, un R5, un Porsche 2010, un N5 y diferentes Mitsubishi Lancer Evo, entre otros. En Gran Canaria, salvo ocasiones esporádicas, el parque se vuelve más obsoleto y menos variado.
¿Cómo hemos llegado a esta situación? ¿Se ha distraído la FALP a la hora de promocionar y gestionar el automovilismo que vive bajo su paraguas? ¿Ha destinado más esfuerzo a consolidar las pruebas que la propia federación organiza? ¿Podrá igualar el panorama o, incluso, darle la vuelta?
No sé si encontraré una respuesta a estas preguntas. Lo que sí es cierto es que, en año de elecciones, la diferencia con la provincia tinerfeña es alarmante. A los números me remito. Ellos, a la postre, son los que dictan si algo se ha hecho bien o si se ha hecho mal.