Julio Martínez y Carlos Larrodé no pudieron defender la tercera plaza en el provincial de rallyes. En el ‘Isla de Gran Canaria’ una mangueta trasera del Porsche 996 GT3 decía adiós y con ella se iban las esperanzas de los grancanarios, que suman su primer ‘cero’ en el campeonato.
“Ha sido una pena porque estábamos teniendo buenas sensaciones”, comentó nada más confirmar su abandono el piloto de Revi S.L., SOALDEA, Tamaran, Cadena Logística, Grimaldi Cargo Canarias y Bar-Cafetería Lanzarote. “En el descenso de Los Marteles”, el que era segundo tramo del rallye y primero en la jornada del sábado, “notamos que algo no iba bien en la parte trasera del Porsche”, explicaba Julio Martínez. En el enlace hacia la tercera prueba especial del rallye certificaban que algo no andaba como debía en la parte posterior derecha.
“En la salida del siguiente tramo solicitamos dos minutos para el equipo que venía a continuación”, una especial que lograron acabar pero, por desgracia para sus intereses, iba a ser la última en la primera participación del piloto de Revi S.L. en el decano de los rallyes a nivel nacional. “La mangueta trasera derecha se había roto y prácticamente nos quedábamos sin opciones de continuar”, aunque se valoraron diferentes soluciones. “Pensamos en alguna intervención de urgencia, pero no íbamos a tener mucha garantía en cuanto a seguridad”, por lo que de manera inteligente decidían abandonar y mirar al futuro. “Menos rodar y conocer más los tramos, todo lo demás no era precisamente positivo”, argumentaba el joven piloto canario.
Julio Martínez y Carlos Larrodé habían comenzado bien en la tarde del viernes. En las inmediaciones del Estadio de Gran Canaria se celebraba un tramo espectáculo, nada menos que el arranque oficial del ‘Isla de Gran Canaria’. Allí, donde llegaron a liderar provisionalmente la tabla, comenzaron con una sexta posición que hubiese sido un buen número por el que pelear en la jornada del sábado. “A pesar de completar dos de los tres tramos con problemas estábamos a un paso del top ten”, una muestra de que el idilio Martínez-Larrodé-Porsche ha ido madurando en esta primera parte de la temporada.
Y como las sensaciones son positivas no queda otro remedio que mirar al futuro. La cita inmediata en el calendario de Julio Martínez es la Subida de Arucas. Pero para estar ahí en plenitud de condiciones antes hay que dejar en orden de marcha el Porsche 996 GT3. Un certamen, el del provincial de montaña, en el que es actualmente segundo después de la brillante actuación que protagonizó en la reciente Subida a La Pasadilla.
